Algo distinto para 2019

Cerca ya del final de 2018, es momento de analizar los objetivos alcanzados en estos doce meses y las cuestiones que quedan pendientes. Precisamente, en diciembre de 2017, en este mismo blog, en la entrada «Reflexiones para acabar el año» (https://ruralsiglo21.org/2017/12/17/reflexiones-para-acabar-el-ano/) planteaba las cuestiones más importantes acaecidas en el ámbito de la agricultura, la ganadería, la alimentación, el medio ambiente y el desarrollo rural, tanto en Castilla-La Mancha (incorporación de jóvenes a la agricultura, visibilización de las mujeres rurales, integración comercial en la industria agroalimentaria, entre otros) como a nivel nacional; y los retos en estas mismas materias para este 2018 que acaba, principalmente, la negociación de la reforma de la PAC y la política del agua.
Pues bien, ambos temas nos han acompañado todo el 2018, pero no ha sido este el año en el que se han resuelto. Ni siquiera se han afrontado con la decisión suficiente como para alcanzar acuerdos en un futuro a medio plazo, como he analizado en este blog en algunas ocasiones. Y siempre he destacado la necesidad de atacar estos problemas -o retos- con valentía. Valga como ejemplo este extracto de la entrada «Agua, soluciones, no problemas», de agosto de este año (https://ruralsiglo21.org/2018/08/12/agua-soluciones-no-problemas/):
«Esto es política. La política de decidir -y ser capaces de explicar la decisión- a todos, los que se sienten beneficiados y a los que se sienten perjudicados, por la decisión tomada. La de verdad, la que siempre supone riesgos, pero que marca las diferencias entre las distintas opciones políticas.
Soy consciente de que no es nada fácil, pero esa es la audacia que debemos pedir a quienes toman las decisiones en materia de agua. Estoy seguro de que hay esperanzas todavía. No perdamos la ilusión, gracias a la cual podemos avanzar.»
Precisamente hoy, en lugar de hacer estrictamente un balance de 2018 o anticipar los retos de 2019, quiero partir de este extracto para hacer un planteamiento de análisis mas político, menos sectorial y, por tanto, menos técnico de lo habitual en este foro.
Vivimos tiempos convulsos en nuestro país, con cambios disruptivos y nuevos paradigmas en la política y en la sociedad. Y es preciso que aquellos que tenemos responsabilidades públicas asumamos estos cambios y afrontemos la realidad desde una perspectiva nueva. Una perspectiva que exige contar con la sociedad y hacerla partícipe de las decisiones. Para ello, son necesarios políticos audaces, valientes, que no tengan miedo a contar con la gente, en el sentido mas ambicioso de la expresión. Y ejercer el liderazgo, imprescindible en puestos de responsabilidad.
Lo analizo en dos fases.
Por un lado, la necesidad de contar con la sociedad. No significa escucharles, ni siquiera tenerles en cuenta, sino hacerles responsables -o corresponsables en algunos casos- de las decisiones a adoptar. Un buen ejemplo, al que he dedicado varias entradas en este blog, aun siendo imperfecto y muy limitado, es el funcionamiento de los Grupos de Desarrollo Rural, GDRs, a la hora de gestionar una parte de los fondos de la política de desarrollo rural en la Unión Europea. El enfoque ascendente, donde son los habitantes de los pueblos los que deciden las estrategias o modelos de desarrollo -enfoque ascendente y desarrollo endógeno-. No se les escucha para tomar las decisiones, ni se les tiene en cuenta; su papel es mucho más importante: son ellos los que deciden, la sociedad civil, en una suerte de lo que podríamos definir como democracia participativa.
Para que esto sea posible y, sobre todo, exitoso, es necesario un paso previo, el liderazgo político. Recientemente, en El País (https://elpais.com), de forma magistral, Alex Grijelmo diferenciaba entre dos tipos de liderazgo político, el que se adapta a lo que le pide o demanda, o piensa una sociedad; y el que plantea una idea (ideología) e intenta convencer a la sociedad de que ese es el camino correcto (https://elpais.com/elpais/2018/12/21/opinion/1545383879_895956.html).
Por supuesto, el segundo liderazgo es mucho más necesario, me atrevería a decir que imprescindible para el desarrollo de un país. El primero es fácil de encontrar en nuestra sociedad. El segundo escasea y lastra la acción política y la modernización del país.
Cuando confluyen un liderazgo político valiente y una cesión de responsabilidades a la sociedad, los resultados son mejores y hay mas probabilidades de alcanzar el éxito. No hay que tener miedo a ambas cosas. Solo con liderazgos de verdad, que van por delante de la sociedad, escogen una senda que recorrer e intentan convencer a la ciudadanía de que es la correcta; y con la participación del conjunto de la población; la sociedad mejora, se moderniza, abandona enfoques trasnochados y avanza sin discusión por el siglo XXI -y no por los anteriores- hacia el futuro -y no hacia el pasado-.
Este planteamiento dual -verdaderos liderazgos y la puesta en práctica de la democracia participativa- tiene que servir para afrontar retos como la política del agua, el despoblamiento o la transición ecológica de la economía, entre otros, verdaderas cuestiones relevantes para un país que necesita de ilusiones y planteamientos de futuro. Son tres ejemplos en los que no sirven planteamientos de épocas pasadas, de formas de hacer política anticuadas que exigen de liderazgo, diálogo y mucha, mucha participación.
Y también para resolver las cuestiones territoriales pendientes, desde el sentido común y el reconocimiento y respeto a las posiciones de todos. Una democracia madura, como debe ser la española, 40 años después de la aprobación de la Constitución, debe aspirar a planteamientos como el que esbozo hoy en este blog.
Así lo espero para este 2019 que está apunto de comenzar.
Y también os deseo a todos los que seguís con interés ruralsiglo21.org, que acaba de cumplir ya seis años gracias a vuestro apoyo, un feliz 2019, repleto de éxitos e ilusiones.
Sr. consejero:
Se marcha usted después de tres años y no sabemos si volverá o no (los electores y los partidos políticos decidirán).
Los habitantes del Campo de Montiel nos preguntamos:
-¿Por qué si se suporponen en un mapa, las comarcas menos densamente pobladas, coinciden con las zonas de «rabioso» secano ?
Esperábamos una solución por parte de su Administración al pantano del Castillo de Montizón, una obra que llevamos esperando más de 100 años, como una vez le comenté, pero me temo que seguiremos esperando.
Le esperaremos con la piel mas cuarteada, de sed… y de viejos
Buenos dias. En primer lugar, gracias por tu fidelidad a ruralsiglo21.org y por tu interés estos años. En los últimos meses se ha reactivado el proyecto de la presa del
Castillo de Montizon. Sabes que la inversión la debe hacer el Estado, pero estamos trabajando intensamente para acelerarla y que en esta legislatura que se inicia se pueda hacer de verdad. Espero darte buenas noticias pronto.
Soy plenamente consciente de la importancia del agua para la vida de nuestros pueblos, más si cabe en el Campo de MONTIEL, una comarca que conozco y quiero.
Un saludo
Buenas,
Quería preguntarle una duda para ver si me la puede resolver usted, porque no consigo una respuesta clara al 100% en la administración, le estaría muy agradecido.
El tema es el siguiente:
Me incorporé como jóven agricultor en verano de 2017 tras recibir la Resolución Favorable de la Consejería de Agricultura (con la convocatoria de junio de 2016).
En mi plan empresarial, para dicha incorporación, puse las hectéreas que tenía disponibles en ese momento, 35 hectáreas de leñosos, con las que podía empezar a trabajar desde el primer momento. En una de las visitas que hice a mi OCA, antes de realizar la PAC 2018, me comentaron que si tenía la intención de incrementar la explotación, al pedir Derechos a la Reserva Nacional, marcara también la casilla de «incorporación por fases». Al parecer, esto era algo novedoso que en convocatorias anteriores no estaba y que nos permitiría, a los jóvenes agricultores, pedir Derechos 2 años en lugar de 1 como se solía hacer, pero solamente en caso de incrementar nuestra explotación durante el proceso de incorporación, siempre y cuando dicho proceso de incorporación no estuviera cerrado, para lo cual, según Resolución Favorable fechada en Mayo de 2017, disponemos de 3 años, es decir, hasta Mayo de 2020, fecha límite en la que se debe justificar y demostrar el cumplimiento total del Plan Empresarial presentado en su momento. Así lo hice, pedí Derechos a la Reserva en la PAC 2018 y marqué dicha casilla.
Pues bien, a día de hoy ,con la incorporación sin cerrar, quiero incrementar mi explotación con 40 nuevas hectáreas de almendros con contrato de arrendamiento por 20 años. Es una ocasión que se me ha presentado ahora. Mi explotación pasasará de 35 a 75 hectáreas.
Pregunté de nuevo en mi OCA y en la Consejería por la posibilidad de pedir de nuevo Derechos de estas nuevas 40 hectáreas en la PAC 2019 ó 2020, siendo la segunda vez que pediría, sin cerrar todavía la incorporación y sin solicitar el pago final del 40% que me queda por cobrar (fecha límite para ello Mayo de 2020, 3 años a contar desde la fecha de Resolución Favorable).
Hay dudas al respecto: por un lado me dicen que si que se podrían pedir esos 40 nuevos Derechos. Por otro lado me dicen que no, que la «incorporación por fases» está enfocada a los jóvenes que en el momento de hacer el Plan Empresarial disponían de un nº de hectáreas para empezar a trabajar, pero tenían la certeza y se comprometían a tener más en el futuro y así lo reflejaban en su Plan Empresarial, utilizando todas ellas (las que ya tenían más las que tendrían) para hacer los cálculos de viabilidad de la explotación y justificando antes de los 3 años que han reunido lo que dijeron y que reflejaron por escrito. Según me comentan, ésto no lo hace nadie, y todos los jóvenes se incorporan con lo que tienen disponible en ese momento, a través de pre-contratos, en el momento de realizar la solicitud de incorporación, por lo que esta «novedad» resultaría inútil.
Mi pregunta es ésta…¿puedo pedir Derechos de estas 40 nuevas hectáreas que me han surgido, teniendo en cuenta lo siguiente:
– Sería la segunda vez que pido.
– Marqué la opción de «incorporación por fases» en la PAC 2018, por la intención de ampliar explotación, pero sin saber en que cantidad exacta, según negociaciones u oportunidades de compra o arrendamientos.
– Dichas nuevas hectáreas no aparecen en el Plan Empresarial presentado en su momento.
– Dispongo de 3 años para cerrar la incorporación (hasta Mayo de 2020)
– No he solicitado el cobro del 40% final de la incorporación.
Un saludo y muchísimas gracias de antemano.
Buenas noches Consejero!
Quería comentarle lo siguiente: soy un joven incorporado con la convocatoria de 2016. Mi padre se jubiló y llevo su tierra y otras parcelas, tanto propias como arrendadas. Mi primera PAC la hice en 2017, con los Derechos que me cedieron pero sin pedir a la Reserva Nacional porque quería adquirir más tierra en arrendamiento antes de pedirlos. Mi padre me cedió su expediente de Agricultura Ecológica e hice de antemano los cursos pertinentes. En esa misma PAC ya solicité la ayuda a la Agricultura Ecológica que él tenía. En la PAC de 2018 solicité Derechos a la Reserva Nacional y, como siempre, ayuda a la Agricultura Ecológica.
Pues bien, a día de hoy, casi 2 años después de la incorporación:
– Ayuda Agricultura Ecológica 2017 (5.000€) y 2018 (5.000) = 10.000€ Cobrados a día de hoy: 0 €
– PAC 2018: alrededor de 6.000. Cobrados a día de hoy: 0 €
En resumen: de 16.000€ que debería de tener disponibles, para auxiliar parte de los gastos de mi explotación, no he cobrado ni un duro.
Según me dicen, el traspaso de expedientes de Agricultura Ecológica van muy lentos y se están pagando ahora los de 2016, increíble aunque parezca mentira, estando en 2019 y siendo un recién incorporado.
Con respecto a la PAC 2018, al pedir Derechos a la Reserva Nacional se retrasa mucho el pago, siendo los últimos en cobrar.
Una explotación lleva muchos gastos, más si cabe cuando te estás iniciando en la actividad. Las facturas de proveedores, gasóleo, seguridad social, arrendamientos,…hay que pagarlos casi en el acto, sin embargo, muchas veces vivimos con la incertidumbre de cuándo nos entrará dinero, sobre todo en momentos en los que las cosechas apenas cubren gastos y poco más.
Cuando la Administración nos reclama cualquier tipo de documentación ponen en negrita y subrayado que el plazo de entrega es de 10 días. ¿Para pagar las ayudas asignadas de cuantos años disponen ustedes?
Un saludo.
El liderazgo ideológico es el único necesario. Los políticos deberían ser siempre las personas con visión de futuro que hicieran transformarse y avanzar a la sociedad hacia el progreso, los derechos y el bienestar.
Por supuesto el control democrático permanente de una ciudadanía bien formada y con espíritu crítico, que cuente con canales para expresarse de firma transparente es también imprescindible.
Las decisiones en favor del progreso colectivo (y no particular de determinados grupos) no son difíciles de explicar. La inmensa mayoría de los ciudadanos las reconocemos.
Ojalá los políticos explicarán más muchas decisiones, sin paternalismo. Por ejemplo la de favorecer la construcción de Macrogranjas en zonas en despoblamiento.
Los GDR podrían ser entidades que representasen a la sociedad civil organizada si no fuera porque están demasiado politizados, ya yo en la toma de decisiones como a nivel técnico. Además la excesiva burocratización a la que les ha abocado el FEADER hace tiempo que les está paralizando. Habría que tratar de resolverlo de cara al futuro.
Gracias por el blog, por las reflexiones y por dar la oportunidad de intervenir.
Saludos
Feliz año y sigue por favor con tantas opiniones y estrategias de desarrollo en la agricultura bajo tus puntos de vista Muy IMPTES!!!